Ecuador.- Una flota de 250 barcos en su mayoría chinos, navegan por aguas internacionales entre el Ecuador continental y las Islas Galapagos, una práctica que se ha tornado recurrente por parte de los navíos asiáticos, quienes acuden cada año para pescar las especies que hay en la región, muchas de las cuales están protegidas por tratados internacionales.
El Gobierno ecuatoriano advirtió a China que hará respetar su soberanía marítima alrededor del Archipiélago de las Galápagos, a unos 1.000 kilómetros de la costa continental, ante la proximidad a esas aguas de una flota pesquera de ese país.
“La Cancillería ecuatoriana ha hecho gestiones tanto en Beijing como en Quito para hacer conocer a las autoridades chinas que el Ecuador hace respetar sus derechos marítimos sin diferencia de banderas”, dijo este jueves el ministro de Exteriores, Luis Gallegos, en un comunicado difundido por su oficina en el que advierte que “esos derechos no se violan”.
El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, informó el sábado que ha solicitado acercamientos con algunas naciones del Pacífico para buscar una postura regional frente a la amenaza de las flotas pesqueras internacionales.
Aseguró que la Zona Económica Exclusiva alrededor de la Reserva Marina de Galápagos “no solo es una de las áreas más ricas de pesca sino que es un semillero de vida, no sólo para Ecuador sino para el planeta entero, para la biodiversidad y la seguridad alimentaria”.
”Es precisamente por esa riqueza que en esta zona sufrimos una presión inmensa de flotas pesqueras internacionales”, señaló en momentos en que la presencia de decenas de barcos extranjeros en aguas internacionales cerca de Galápagos ha desatado la preocupación local e internacional.Ecuador vigila la actividad de la flota pesquera extranjera cerca a las Galápagos (EFE)
Durante un discurso ante la Armada en el marco del 485 aniversario de fundación de Guayaquil, Moreno indicó que ya el pasado 16 de julio la Marina notificó de la presencia de los barcos.
Se trata de una flota pesquera de más de 250 barcos, principalmente de bandera china, que navegan por aguas internacionales entre el Ecuador continental y el Archipiélago de Galápagos, y que es vigilada por la Armada por si violaran las aguas territoriales ecuatorianas, señaló.
Ante ello, dijo que la Cancillería señaló “al Gobierno chino, de manera cordial pero firme, que Ecuador hará prevalecer sus derechos marítimos sobre su zona económica exclusiva, sin distinción de bandera”.
“Al mismo tiempo, he dispuesto que se realicen las consultas necesarias con los Estados ribereños del Pacífico, los hermanos países de Colombia, Panamá, Costa Rica, Perú y Chile, para tener una postura regional sobre este tipo de amenazas”, dijo.
ADVERTENCIA DE ECUADOR
El pasado jueves, el ministro ecuatoriano de Defensa, Oswaldo Jarrín, advirtió que incautarán los buques foráneos que ingresen ilegalmente en el territorio del país y puntualizó que la flota pesquera extranjera está en aguas internacionales.
”En ningún momento se ha violentado, se ha incursionado, se ha penetrado o ha entrado un buque de la flota pesquera internacional en la zona económica exclusiva” de Ecuador, aseguró Jarrín entonces al anotar que “muchos” de los barcos son chinos, aunque no saben si pertenecen al Estado o son particulares. Y advirtió que si algún barco ingresa “será incautado”, como ocurrió en 2017.
En agosto de ese año, Ecuador detectó una gran flota de pesca ilegal cerca de la Reserva Marina de Galápagos, compuesta por 297 buques, uno de ellos el Fu Yuan Yu Leng 999, que fue incautado y que desde este vienes es parte de la escuadra naval.
Con una eslora de 99 metros y con capacidad de navegación de hasta sesenta días, ese barco fue capturado con 300 toneladas de pesca prohibida en sus depósitos.
De acuerdo a la Armada de Ecuador la flota que estos días está cerca de Galápagos, la integran “unas 260 embarcaciones, entre pesqueros, buques de abastecimiento y bodegaje”, que se han situado justo “fuera del límite de la zona económica exclusiva” del país.
PREOCUPACIÓN AMBIENTAL
El archipiélago de Galápagos está formado por 13 islas grandes, 6 menores y 42 islotes, y por su rica biodiversidad es considerado un laboratorio natural que permitió al científico inglés Charles Darwin desarrollar su teoría sobre la evolución y selección natural de las especies.
En medio de esta coyuntura, Norman Wray, ministro presidente del Consejo de Gobierno de Galápagos, se mostró preocupado por las especies en la zona. ”Datos desgarradores: Esperanza, tiburón ballena: marcada 09/2019. Dejó de transmitir 05/2020. 280 días transmitiendo. Entre ZEE y RMG insular. Puntos blancos flota china, coincidencia?”, escribió en su perfil de Twitter.
Un tiburón martillo nada cerca de la Isla del Lobo en la Reserva Marina de Galápagos el 19 de agosto de 2013. Foto tomada el 19 de agosto de 2013. REUTERS/Jorge Silva/Archivo Foto
De su lado, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, en inglés) en Ecuador ha señalado su preocupación ante la presencia de la flota pesquera pues “representa una amenaza recurrente para los recursos pesqueros y la biodiversidad marina, especialmente en las cercanías de Reserva Marina de Galápagos”.
Por ello, formuló un llamamiento “urgente al Estado ecuatoriano a que se tomen las medidas necesarias en el corto, mediano y largo plazo para asegurar la conservación de la biodiversidad marina, la sostenibilidad de los recursos pesqueros y la resiliencia de nuestros mares”.
Este hecho sucede en aguas internacionales, fuera de los límites de jurisdicción nacional, lo que lo convierte en un problema complejo que debe abordarse desde varios frentes y a diferentes niveles, anotó WWF-Ecuador en un comunicado. Y subrayó que en aguas internacionales no hay políticas claras de manejo o de propiedad, es decir, la situación que actualmente enfrenta Ecuador es un problema geopolítico, que encaran todos los países costeros a nivel mundial.
Destacó la importancia de que los países cooperen para administrar de manera responsable y sostenible un bien global como lo son los océanos, a fin de que los mismos ayuden a garantizar la seguridad alimentaria y la subsistencia de millones de personas.
Con información de EFE