
El Congreso de Jalisco aprobó por unanimidad un acuerdo legislativo impulsado por la diputada Tonantzin Cárdenas para que todas las unidades de transporte público en el estado cuenten con rampas o elevadores, garantizando así la accesibilidad para las personas con discapacidad.
Con este exhorto se exige al titular de la Secretaría de Transporte que asegure que cada unidad cuente con mecanismos que permitan el acceso seguro y autónomo de todas las personas, especialmente aquellas que requieren de una silla de ruedas.
Según datos del INEGI, en Jalisco más de 386 mil personas tienen alguna discapacidad, y la mayoría enfrenta dificultades para moverse en la ciudad. Además, la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2022 encontró que el 31.9% de las personas con discapacidad consideran que las calles y el transporte no están adaptados a sus necesidades.
Actualmente, la Ley de Movilidad y Transporte del Estado de Jalisco ya establece en su artículo 267 que todo el transporte público debe ser accesible, pero en la práctica no se cumple. Hoy, muchas personas siguen dependiendo de la suerte para encontrar una unidad con rampa por lo que, en ocasiones, tienen que esperar hasta dos horas para utilizar el servicio.
“No hay que perder de vista que la movilidad es un derecho ‘puente’, que es indispensable para ejercer el resto de nuestros derechos, esos que constantemente les son negados a las personas con discapacidad motriz en una lógica absurda y mortal que prioriza el auto”, señaló la diputada Tonantzin en tribuna.
Con la aprobación del exhorto, el Congreso exige que las autoridades hagan su trabajo y eliminen de una vez por todas las barreras que impiden el acceso equitativo a la movilidad.