Hablemos de Política
Por Diego Martínez Sánchez
En peligro candidatura de Morena en Oaxaca
Lo que hubiera podido ser uno de los triunfos electorales más “sencillos” en la historia moderna del estado, pareciera estarse complicando por los conflictos al interior del Movimiento de Regeneración Nacional en la entidad oaxaqueña.
Aunque dirigentes estatales, nacionales y hasta los órganos electorales han reconocido a Salomón Jara Cruz como el precandidato único a la gubernatura del estado, la confrontación con la Senadora Susana Harp continúa escalando.
En defensa de sus derechos políticos, Harp Iturribarría llevó su impugnación al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación tras haber sido rechazada en la Comisión de Honestidad y Justicia de su partido, la cual señaló que no existían agravios ya que el proceso en el que ella participó no era para designar al Candidato o Candidata, sino al Coordinador de la Defensa de los Comités de la Cuarta Transformación en Oaxaca, cargo que también obtuvo Salomón.
Sin embargo la respuesta del órgano de control partidista no fue suficiente para la legisladora, quien alega que los criterios de selección no respetaron la igualdad sustantiva que debiera existir para que las mujeres contiendan en las mismas condiciones que los hombres, o al menos, no en espacios desfavorables como ocurrió en dicho proceso.
Además, se suman las denuncias que han interpuesto tanto partidos como ciudadanos en contra del Senador con licencia por supuestos actos anticipados de campaña.
Dichas denuncias se han convertido en una verdadera preocupación tanto para el Senador como para su equipo jurídico, más no así para el dirigente nacional Mario Delgado quien según varios simpatizantes de Jara Cruz, pareciera esperar el momento indicado para traicionar a su hoy aliado, permitiendo que avancen las querellas al grado de poner en riesgo la permanencia del aún aspirante a Candidato.
Otros aseguran que la orden viene de Palacio Nacional, en donde se acordó que para evitar mayores daños al movimiento, se le daría la candidatura a Salomón Jara para que fueran los tribunales quienes se la quitaran, librando a Morena y permitiendo la llegada de una nueva propuesta, esta sí, con la venía de Presidencia.
No obstante, si algo caracteriza a Salomón es la capacidad que ha demostrado para unir a diferentes fuerzas en un proyecto que sobrepasa incluso a Morena como partido, tanto en estructura como arraigo social, por lo que de concretarse la traición, pondría en grave riesgo el esperado triunfo electoral, abriendo las puertas para que el PRI conserve el poder u otro partido lo desplace con su apoyo.
Porque con más de 30 años en el quehacer político local y nacional, Jara Cruz no solo ha acumulado una cuantiosa fortuna acompañada de denuncias por corrupción, también ha construido una importante red que incluye Gobernadores, Senadores, Presidentes municipales, Diputados locales y federales; autoridades de los tres niveles de gobierno, empresarios y hasta grupos del crimen organizado según lo han denunciado sus detractores, lo que sin duda lo convierte en un peligroso oponente, pero incluso él es consciente que no podría hacerle frente al Presidente, por lo que si bien no renunciaría a Morena, sí podría apoyar a otro candidato o candidata, con tal de no entregar lo que él ya considera su victoria.
En unos días se definirá si Salomón Jara podrá contender por segunda ocasión al gobierno de Oaxaca, con una gran posibilidad de ganar, o deberá renunciar a sus aspiraciones y alinearse a una orden presidencial. Dando pie a una verdadera lucha electoral.
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