26 noviembre, 2024 9:17 AM
SEPH-LLEGAN LIBROS 2

Ciudad de México.- La organización Educación con Rumbo denunció que la convocatoria hecha por la SEP para realizar el análisis del Plan y Programas de Estudio para el diseño de los libros de texto gratuitos para la Educación Básica “está alejada de la realidad, ya que en estos momentos aqueja al Sistema Educativo el innegable empobrecimiento de los aprendizajes de los estudiantes”.

La asociación calificó como más urgente implementar estrategias para recuperar al millón de alumnos que en los diferentes niveles educativos han decidido dejar la escuela.

Por medio de un comunicado, Educación con Rumbo puntualizó diversas reflexiones proponiendo que los cambios que se hagan “marquen un camino, una ruta, un rumbo seguro para todos nuestros estudiantes”.

“Pensamos que está alejada de la realidad, ya que en estos momentos aqueja al Sistema Educativo el innegable empobrecimiento de los aprendizajes de los estudiantes, por lo que nos parece poco oportuno distraer recursos y tiempo para pensar en nuevos Planes y Programas de Estudio y mucho menos nuevos materiales educativos. Los inconclusos y empobrecidos aprendizajes que reportan los maestros, nos debería llevar a atender primero esta urgencia”, puntualizaron al mencionan que otra necesidad que debería atenderse es recuperar al millón de alumnos que en los diferentes niveles educativos has decidido dejar la escuela.

Además, refirieron que un cambio del Plan y Programas de estudio debe estar antecedida de un diagnóstico que avise de la urgencia de reorganizar los contenidos de aprendizaje. La última reforma educativa se empezó a implementar en 2017, con tres años que antecedieron a una fina construcción de la malla curricular.

“El ejercicio que hoy observamos parece ser que avanza con procesos paralelos, por un lado, se presenta una propuesta de Asignaturas para cada nivel educativo, y de forma paralela el levantamiento de opiniones en las asambleas y simultáneamente esto alimentará la elaboración de los libros de texto.

Deseamos que la convocatoria no sea un mero acto de legitimación de una propuesta y materiales que ya están elaborados”, agregaron los especialistas.

En otro inciso señalan que les llama la atención que el 24 de marzo del año en curso con la última asamblea en La Paz, Baja California Sur, aún no se sepa cómo considerarán todas las aportaciones para reconsiderar las asignaturas del Plan y Programas de Estudio y cómo se tomarán en cuenta para la elaboración de los libros de texto; pero más complicado aún, cómo se incorporarán para que los libros estén diseñados, impresos y distribuidos en agosto. “Las fechas no las conocemos y los tiempos son sospechosos”, apuntaron.

Indicaron que las preguntas que se han elaborado en las asambleas no parecen pertinentes para ayudar a identificar los enfoques que deberán permear las estrategias que se incorporarán en los materiales educativos.

“Los maestros están agotados, y si este Plan y Programas, así como los libros de textos aparecen en agosto, antes de iniciar el ciclo escolar 2022-2023, esto supondrá que deberán destinar mucha energía para conocerlos y manejarlos; pero además deberán atender el rezago educativo, si nos parece un despropósito de implementación”, reclamaron.

Respecto al impacto que pudiera generan, cuestionaron si un cambio de Plan de Estudio, o de Programas o de Libros de Texto garantiza el cambio de las prácticas de aula de los profesores.

“Nos hubiera gustado ver políticas educativas que enriquecieran el trabajo de los maestros, políticas que ayudaran al equipamiento de las escuelas, políticas que generaran materiales diferenciados para los diversos contextos del país para atacar los retrasos de aprendizaje de los estudiantes, políticas que redujeran las brechas que se abren cada vez más, incluso en alumnos de las mismas escuelas, políticas de actualización permanente de los maestros, políticas que integraran todos los espacios de formación inicial de profesores a la actualización permanente de los que ya están frente a grupo, políticas que visibilicen lo que se está haciendo bien en las aulas mexicanas, etc., etc. Los actores educativos seguimos esperando eso, esto sí cambia y transforma las escuelas”, concluyeron confiando que su postura será tomada en cuenta por la Secretaría de Educación.