Oaxaca.- Una joven de 17 años fue asesinada y calcinada junto a su pequeño hijo en la comunidad de San Miguel de Ejutla, en la región de Valles Centrales.
La menor fue identificada como María Concepción Aragón Cruz, estudiante del Colegio de Bachilleres de Oaxaca, institución que lamentó y condenó el asesinato de su alumna.
De acuerdo a las primeras versiones, la última vez que fue vista, abordaba un mototaxi junto a su hijo afuera de su casa. Horas más tarde, al no tener contacto con ella, sus familiares comenzaron su búsqueda.
Alertados por un incendio en un cerro cercano conocido como El Mexicano, vecinos acudieron al lugar, donde encontraron los cuerpos de la joven y su bebé, parcialmente calcinados.
Al conocer los hechos, las autoridades municipales acudieron al lugar, donde los familiares reconocieron a las víctimas en espera de que arribaran peritos de la Fiscalía.
Desde el 2012 a la fecha, se han registrado más de 400 feminicidios, de acuerdo a diversas organizaciones civiles. Aunque las cifras oficiales no reconocen más de 300.
En el 2017, poco después de la llegada de Alejandro Murat Hinojosa al gobierno estatal, se declaró la Alerta por Violencia de Género ante el incremento de agresiones en contra de las mujeres, sin embargo, hasta la fecha no existen avances en la materia, por el contrario, la situación ha empeorado dado el alto indice de impunidad.
ACTUALIZACIÓN
Este 4 de julio, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) informó que logró la identificación y aprehensión del probable feminicida.
Se trata del imputado identificado como J. A. R. R., -ex pareja sentimental de la víctima- quien fue aprehendido por Agentes Estatales de Investigación el 3 de julio de 2020 y presentado de forma inmediata ante la autoridad judicial que lo requirió, dando cumplimiento a la orden aprehensión asentada en la causa penal 532/2020.
En audiencia, el probable responsable solicitó ampliación del término constitucional, mismo que fenece el 9 de julio de 2020, imponiéndole el Juez de Control prisión preventiva de manera provisional.
Luego de las primeras diligencias, personal del Instituto de Servicios periciales determinó que la causa de la muerte de la adolescente fue asfixia por estrangulamiento. En tanto, la causa de la muerte del niño fue por traumatismo craneoencefálico profundo, con fractura de húmero.