Ciudad de México.- Como parte de la colaboración entre México, Argentina, la Fundación Carlos Slim, el laboratorio farmacéutico AstaZeneca y la Universidad de Oxford para crear una vacuna contra el virus SARS-CoV-2; los países que la adquieran deberán encargarse de vigilar, entre otras cosas, sus efectos secundarios.
De acuerdo con el director General de Epidemiología, José Luis Alomía Zegarra, en México los encargados de realizar esa tarea serán agrupados en un grupo técnico especializado que revisará todo en relación con la obtención y aplicación de dicha vacuna.
Informó durante la conferencia diaria sobre la enfermedad COVID-19, que dicho grupo estará conformado por personal especializado en el tema de vacunación, los institutos nacionales de salud y hospitales de alta especialidad del país, el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), así como “otros actores importantes de la Secretaría de Salud”.
Dijo, además, que también se verá involucrado el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologia (Conacyt) “con el aporte de investigación y expertiz que se tiene tanto en México, como en investigadores internacionales que llevan a cabo estudios con la vacuna”.
También se sumará el Conacyt a dicho consejo, quienes aportarán investigación y expertiz (Foto: REUTERS/Anton Vaganov)
También aseguró que se dará un minucioso seguimiento a las diferentes etapas del desarrollo de la vacuna, pues !todavía no existe una que haya superado todas las fases y que por lo tanto, haya demostrado su utilidad o la prevención en el desarrollo de la enfermedad o mejor aún, que prevenga la enfermedad grave”.
Informó, además, que dicho seguimiento “incluye la valoración de las solicitudes que se tengan de estas empresas de, por ejemplo, poder llevar a cabo estudios en la población en México”.
Alomía especificó que es para ellos muy importante que la vacuna pueda ser probada en México; sin embargo, dijo que para llevarlo a cabo “debe hacerse en un marco de seguridad, de ética y de colaboración con lo países demás países”.
En ese contexto, explicó que además de los lineamientos públicos ya existentes, se contará con uno específico que cubrirá todos los temas de la vacuna y con la logistica necesaria, “incluido el de las pruebas en población mexicana para, en caso de resultar positiva, poder continuar con las diferentes fases de valoración, aprobación”.
Además de los lineamientos públicos ya existentes, se contará con uno específico que cubrirá todos los temas de la vacuna (Foto: EFE/Presidencia de México)
La subsecretaria de Asuntos Multilaterales de la cancillería mexicana, Martha Delgado, dijo en entrevista con Reuters que calcula que nuestro país necesitará unas 200 millones de dosis de la vacuna. La farmacéutica británica estimó, por su parte, que podría producir hasta 400 millones de dosis para toda América Latina.
“La capacidad de producción va a ser entre 30 millones y 35 millones de vacunas al mes. Si necesitamos 200 millones, nos vamos a pasar un tiempo bastante largo vacunando”, dijo Delgado.
Para satisfacer su necesidad de antígenos, México está apuntando hacia posibles acuerdos con otros laboratorios que realizan estudios con miras a producir vacunas en el futuro cercano.
“Tenemos que ampliar nuestra expectativa hacia también otro tipo de vacunas, no solamente una”, dijo la funcionaria. “Y tampoco la producción de Astra va a ser suficiente para México. Nosotros necesitamos un complemento con un par de vacunas más”, añadió.
La búsqueda de esos complementos incluye acuerdos para estudios fase III con la francesa Sanofi, la estadounidense Janssen Pharmaceuticals, filial de Johnson & Johnson, así como las chinas Walvax Biotechnology Co Ltd y CanSino Biologics Inc, estas dos últimas interesadas en fabricar la vacuna en México para distribuirla en América Latina.
México está apuntando hacia posibles acuerdos con otros laboratorios que realizan estudios con miras a producir vacunas en el futuro cercano. (Foto: EFE/Juan Ignacio Roncoroni)
Sin embargo, el “portafolio” de México incluye nueve vacunas, dijo Delgado, quien explicó que las autoridades de salud evaluarán las fases I y II de los estudios clínicos de las cuatro empresas para dictaminar la “viabilidad” de la fase III, lo que podría definirse en unas semanas.
En cuanto a la vacuna de AstraZeneca, la funcionaria dijo que el regulador sanitario, la Cofepris, empezará a analizar los estudios de fases ya concluidas “para ganar tiempo” y acelerar su registro en caso de resultar exitosa la fase III, que está planeada para concluir a finales de 2020.
“Esta es una estrategia del país de diversificación de las posibilidades que vamos a tener de acceder a la vacuna lo más pronto posible con las vacunas que tengan más seguridad y eficacia y, obviamente, a un costo asequible para el país”, dijo Delgado.
*Con información de Reuters