La crisis económica que desató la pandemia apagó a Presidente Masaryk, una avenida de Ciudad de México conocida por sus restaurantes de alta cocina y boutiques de lujo.
Nombrada así en honor a Tomás Masaryk, fundador de la República de Checoslovaquia, la calle está ubicada en el exclusivo barrio de Polanco y muestra ya los estragos de la situación con letreros de “Se Renta” en varios locales que cerraron definitivamente.
“Ese ya chifló (cerró)”, dice un transeúnte a su pareja frente a una tienda de artículos italianos que prometía -en un aviso- reabrir sus puertas el 17 de enero, aunque hoy solo muestra anaqueles vacíos.
Por su ubicación y plusvalía, Presidente Masaryk es una de las zonas más caras para vivir y tener un negocio en el país.
Por ejemplo, la renta en un local de tres pisos llega a costar 400,000 pesos mensuales (unos 20,300 dólares).
Otros están tasados directamente en moneda extranjera, como uno de tres niveles que antes ocupaba una boutique de lujo y se ofrece en 40,000 dólares al mes.
“Les agarró la pandemia”, dice una asesora inmobiliaria que prefiere mantener su nombre en reserva. “Muchas empresas están quebrando”, añade.
Al igual que otras industrias, el sector de lujo se ha visto golpeado por el nuevo coronavirus, cuyo rebrote obligó al gobierno de Ciudad de México a suspender por segunda vez las actividades no esenciales el pasado 18 de diciembre.
Un reporte de la consultora Bain & Company señaló a finales del año pasado que la industria de productos y experiencias de lujo tuvo en 2020 su primera contracción desde 2009.
Algunas tiendas de Masaryk tienen tapiadas las ventanas por seguridad; otras ofrecen la venta de productos por teléfono y entrega a domicilio.
De no ser por los restaurantes que apenas el lunes reabrieron en terrazas al aire libre, presidente Masaryk estaría aún más desierta.
Los analistas que consulta mes a mes el Banco de México (central) estiman que la economía mexicana, la segunda más grande de América Latina después de Brasil, se contrajo 9% en 2020 ante el impacto de la pandemia.
México, de 128 millones de habitantes, es el cuarto país más enlutado por el covid-19 en números absolutos, con 141.248 muertes, aunque ocupa el vigésimo lugar en defunciones por cada 100,000 habitantes, según una base de datos de AFP alimentada con cifras oficiales. A ello se suman 1,6 millones de contagios.