El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó, por unanimidad de 479 votos, reformar el artículo 35 de la Ley Agraria, con el objetivo de que los consejos de vigilancia de los comisariados ejidales se rijan por el principio de paridad de género.
El dictamen, remitido al Senado de la República para sus efectos constitucionales, precisa que dichos consejos estarán constituidos por un presidente o presidenta y dos secretarios o secretarias propietarias y sus suplentes.
Explica que la modificación tiene el propósito de establecer un lenguaje inclusivo e incluyente; que los consejos los conformen el cincuenta por ciento de hombres y cincuenta por ciento de mujeres, y con ello visibilizar e incluir que las mujeres los puedan presidir.
Refiere que la mayoría de las instituciones, cargos administrativos y de elección popular se rigen por el principio de paridad de género, y la Ley Agraria no debe ser la excepción.
Desde la tribuna, la diputada María Teresa Rosaura Ochoa Mejía (MC), promovente de la reforma, explicó que este cambio permitirá armonizar la ley con el principio constitucional de paridad de género, por lo que los consejos de vigilancia de los comisariados ejidales se regirán ahora por dichos principios.
Además, coadyuvar al reconocimiento de la personalidad jurídica de los núcleos de población ejidal y comunal en donde se protege la propiedad de la tierra.
Precisó que actualmente la Ley Agraria no establece el principio de paridad de género para la integración de candidaturas del Consejo de Vigilancia, por lo que “las mujeres, quienes histórica y sistemáticamente han sido excluidas a ocupar este tipo de puestos, se encuentran en situación de franca desigualdad frente a los hombres”.
La reforma, agregó, “da paso a la feminización del campo. La perspectiva de género y la justicia agraria deben ser el ancla que permitan a las mujeres desarrollarse y que ellas también decidan. Es un acto de justicia con las mujeres del campo y con el campo mismo”.