Por Diego Martínez Sánchez / @diegomtzsanchez
Continúa la lucha por la candidatura a la Presidencia de Oaxaca de Juárez al interior de los partidos políticos y coaliciones que contenderán en el próximo proceso electoral.
En el gobernante partido Morena, que contenderá solo, la reelección de Oswaldo García Jarquín está cerca de ser descartada no solo por los nulos resultados y los señalamientos por corrupción, también por las denuncias en su contra por violencia política de género, lo que lo imposibilitaría como contendiente.
Esto deja el campo abierto a Jesús Romero López, una de los más recientes incorporaciones al grupo del Senador Salomón Jara Cruz, y quien bajo una campaña mediática ha buscado posicionarse como el “mero mero”, aunque no sabemos de qué, ya que a lo largo de su vida política, tanto en el PRD como en el Partido del Trabajo y ahora con Morena, los resultados de su trabajo son aún desconocidos.
Por su parte, la autodenominada “oposición”, integrada por el Partido Revolucionario Institucional, Acción Nacional y el PRD, bajo la coalición “Va por Oaxaca”, aún no define si lucharán juntos o cada quien por su lado, aunque en este último escenario sus oportunidades son casi nulas.
Acción Nacional advirtió que podría postular a sus propio candidato o candidata, sonando los nombres de la actual Diputada Federal, Alejandra García Morlan y de Samuel Gurrión, aunque este último aún no define si es panista, priista o próximamente morenista.
En el PRD, sus candidatos al igual que sus posibilidades de ganar, son prácticamente inexistentes. Siendo el nombre de Raúl Castellanos, uno de los fundadores en Oaxaca y quien contendiera por el mismo cargo bajo las siglas del PANAL; el único que ha sido mencionado.
En el caso del PRI, quien se ve obligado a recuperar la Verde Antequera y con ella la ventaja para mantener el Gobierno del Estado, los candidatos y candidatas son muchas, pero solo uno ha hecho eco en todos los sectores y actores políticos: Javier Villacaña Jiménez, quien no solo podría derrotar a Morena, sino abrirle paso a otros candidatos en la zona metropolitana y los Distritos colindantes, convirtiéndose en el “Mero Mero” para la ansiada continuidad gubernamental.
Tras varios meses fuera de la escena pública, Javier Villacaña regresó como la esperanza tanto del PRI, como del PAN y del PRD, para recuperar la capital y en un futuro no muy lejano, mantener el estado.
Sin embargo, la mayor oposición la ha encontrado al interior de su partido, en donde grupos cercanos al gobernador buscan a toda costa tirar su candidatura, así implique perder la capital y quizás, la gubernatura.
En caso de confirmarse el pronóstico y Javier Villacaña Jiménez logre la nominación a la Presidencia de Oaxaca de Juárez, Morena deberá prepararse para enfrentar un verdadero reto, ya que el poder de convocatoria del también Senador suplente, rebasa las filas del priismo. Un efecto del que carecen los demás aspirantes.
Y aunque no se debe subestimar al resto de partidos como el PT, PVEM, PRS, PES y anexos, hasta el momento no existen prospectos a candidatos o candidatas que pudieran hacerle frente a estas dos agrupaciones, no solo por los presupuestos, las estructuras o los años de “experiencia” electoral, adquirida o heredada.
Sino por la difícil situación que enfrentan millones de personas en la ciudad capital y en todo el estado, por lo que hoy la improvisación está prohibida.
Esto fue #HablemosDePolítica.