El Zumbido del Moscardón
Alejandro Leyva Aguilar
Hoy 15 de mayo quiero hacerle un reconocimiento a las mamás y los papás que con gran ahínco y profesionalismo, se dedicaron en sus casas a atender a sus hijos en el tema educativo. Decía que la pandemia saca a veces lo mejor de nosotros y en el tema de cercanía familiar y de atención a los niños y jóvenes, las mamás y los papás en esta cuarentena, fueron los mejores maestros.
Hoy conmemoramos en México, el mal llamado Día del maestro y digo mal llamado porque en las aulas son muy pocos quienes han terminado una maestría en cualquier disciplina, no se diga en pedagogía. Lo que tenemos en las aulas son profesores unos muy buenos que terminaron su carrera en el magisterio y unos muy malos que heredaron o compraron plazas; entre ellos unos, que por lo menos acabaron una carrera profesional, otros que no tienen ni la primaria.
Tal vez de esa realidad saco nuestro “presidente” -así en minúsculas y entre comillas- que los ingenieros se sienten mal porque las comunidades construyan carreteras, o que los periodistas nos sentimos mal porque los poseedores de la verdad son los del pueblo y no los que estudiamos una carrera profesional; tal vez por eso él no comprende que una carretera de esas ya lleva muchos accidentes por que al pueblo se le olvidó hacer un peralte.
Y si hay algo que extrañaremos en Oaxaca, será la propuesta e intención del Ex Presidente Enrique Peña Nieto de buscar una reforma educativa que le devolviera al estado, la rectoría de la educación. La reforma en telecomunicaciones por ejemplo, nos ahorró varios cientos de pesos en nuestros bolsillos al eliminar el cobro de llamadas nacionales y el costoso roaming, pero si hubo una reforma realmente que podría cambiar a México esa era la educativa que esta cuarta transformación tiró por la borda.
Los niños en Oaxaca, hasta esta administración del Maestro -ese sí con título de maestría- Alejandro Murat Hinojosa, no habían tenido un ciclo escolar completo ni en el sexenio de Ulises Ruiz, ni tampoco en el del insufrible Gabino Cué y tuvo que ocurrir una pandemia para que nuestros muchachos se quedaran en casa a Merced de los que sus padres podrían hacer por ellos y he visto historias muy conmovedoras en esta cuarentena.
Pero algo importante debe gestarse al respecto de la educación en nuestro país porque este sistema obsoleto prusiano con un profesor sabelotodo frente a un grupo de 50 niños, es seguro que no funcione como debiera, porque es prácticamente imposible ponerle atención a todos los alumnos. Hoy en la era de la Internet tenemos todo el conocimiento a un click de distancia y por tanto una herramienta insuperable para estas nuevas generaciones que ya nacieron prácticamente con un chip distinto en el cerebro.
En diciembre de 2018 tuve la oportunidad de ser ponente sobre la nueva narrativa transmedia en el foro de Managua y tuve acceso a información que realmente espanta: el 70 por ciento del tiempo activo de un niño entre 7 y y 14 años, lo pasa viendo su teléfono inteligente, el estrés más grande para ellos es quedarse sin pila y si a eso le sumamos que la Big Data y sus algoritmos los meten en una burbuja de contenidos que ellos no escogen, pues imaginen lo que pueda estar gestándose en esas mentes inocentes.
Pero si espanta, entonces es una amenaza y por tanto un área de oportunidad porque es la herramienta perfecta para ofrecerles ahí, contenidos educativos pero tenemos que prepáranos para eso porque como dije líneas arriba muchos de los profesores que están frente al aula hoy, no tienen ni la información necesaria y mucho menos la preparación para generar contenidos para la web.
Ni siquiera las escuelas particulares estaban preparadas para esto, no tienen plataformas para la educación cibernética por eso es importante que los próximos profesores aprendan, de manera urgente el uso de las nuevas tecnologías para aplicarlas a las enseñanzas.
Tenemos una gran oportunidad de que el sistema Prusiano de hace 400 años, termine de una vez por todas y gracias a un virus. Estamos en la antesala de una nueva manera de educar a los niños mexicanos y, necesitamos por tanto, nuevo sistema completo, un nuevo sistema en donde los profesores enseñen de manera diferente, actual y con el poder de todo el conocimiento guardado en la web, en donde la Big Data sea totalmente aprovechable.
¿Que no se puede porque no todos los niños en MÉXICO tienen acceso a internet?, solo hay que ver las estadísticas de consumo y las plataformas que podemos usar para llevar a cada rincón de nuestra Nación: tenemos satélites poderosos, tenemos infraestructura de aprovechamiento digital en los sistemas públicos de radiodifusión y tenemos un Instituto Autónomo de Telecomunicaciones que puede regularnos ¿qué nos falta?, me parece que voluntad e imaginación y un líder que no esté pensando en prohibir el uso de las redes sociales y de la internet.