Una enfermera se manifiesta al exterior de un hospital en Ciudad de México. Alfredo Estrella AFP vía Getty Images

Una enfermera se manifiesta al exterior de un hospital en Ciudad de México. Alfredo Estrella AFP vía Getty Images

Por Alfredo Martínez de Aguilar

  • Dónde está la voz de las feministas en defensa de los derechos humanos de las doctoras, enfermeras y paramédicas, que están en la primera línea de combate al COVID-19, y que participaron en la marcha del pasado 8 de marzo, y en #UnDíaSinMujeres
  • De nada ha servido que, incluso, diputados interpongan quejas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por no proporcionar el equipo de seguridad necesario para el personal médico que combate la pandemia del coronavirus COVID-19

La ideologización izquierdista prostituyó la defensa de los derechos humanos. La mayoría de las organizaciones defensoras de los derechos humanos en México y Oaxaca están políticamente prostituidas y corrompidas.

Está visto que sólo defienden única y exclusivamente a sus correligionarios. Muchos de ellos integrantes de la cofradía lésbico, gay, bisexual y transgénero. O bien, activistas públicos de organizaciones radicales y milicianos clandestinos de grupos armados.

No somos ni misóginos, homofóbicos ni menos discriminatorios, Dios guarde la hora de semejante insensatez. Reconocemos que es positiva y apoyamos la lucha de los derechos de igualdad para las comunidades sexuales minoritarias.

Nos indigna, sí, que las dirigentes de ese movimiento manipulan a nivel nacional la defensa de los derechos humanos interesada y convenencieramente. Monopolizan parcial y maniqueamente la lucha, y se olvidan del resto de las personas.

Es parte del gran poder corruptor de la corrupción que todo pudre en México y Oaxaca.

Las supuestas organizaciones defensoras de los derechos humanos son, en realidad, grupos de presión política y chantaje económico en busca de beneficios personales y grupales.

A las pruebas nos remitimos. Ante los hechos no hay palabras que valgan ni pretextos justificatorios. Dónde está la voz de las feministas en defensa de los derechos humanos de las doctoras y enfermeras, que están en la primera línea de combate al COVID-19.

De nada ha servido que, incluso, diputados interpongan quejas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por no proporcionar el equipo de seguridad necesario para el personal médico que combate la pandemia del coronavirus COVID-19

Miles de doctoras y enfermeras se hicieron eco la convocatoria de la madre de todas las marchas el pasado 8 de marzo, con motivo del Día Internacional de la Mujer y participaron en #UnDíaSinMujeres y hoy las feministas, se olvidan de ellas.

En una manifestación histórica más de 80,000 mujeres salieron a las calles en la Ciudad de México para exigir respeto, equidad y sobretodo que “ni una más” de ellas sea asesinada con la impunidad que ocurre hoy en México.

La mayoría lo hizo de manera pacífica, con pancartas, brillantina, blusas moradas y pañuelos verdes. Otras más rompieron vidrios, quemaron y pintaron bardas. ¡Estamos con ellas! ¡Basta ya de agresiones y feminicidios!

Lo hicieron porque están molestas, enojadas, ¡están hasta la madre! del patriarcado, de las agresiones, de las desapariciones y la violencia que mata a 10 mujeres cada día en el país, sin que nadie haga nada por detenerlo.

En total en Oaxaca hasta el sábado sumaban 56 doctoras, enfermeras y personal de otras áreas en los hospitales, contagiados del nuevo coronavirus SARS-COV-2COVID-19. Y la voz de las feministas en defensa de sus derechos humanos a la vida y la salud?

Es de señalar que estos casos se han reportado principalmente en el Hospital Regional de Alta Especialidad, Hospital Regional “Presidente Juárez” del ISSSTE, Hospital General de Zona 1 del IMSS, en el Hospital General Dr. Aurelio Valdivieso y algunos centros de salud.

Y junto con la defensa de los derechos humanos a la salud y la vida de las doctoras y enfermeras, la de las técnicas de laboratorio, y de las mujeres integrantes del personal de intendencia y administrativo del sector salud.

Todos ellos forman el gran ejército de héroes anónimos con batas blancas que prestan servicio en clínicas y hospitales reconvertidos, para atender pacientes contagiados del coronavirus SARS-COV-2. Pero también las paramédicas.

Acaso no están protegidos por los derechos humanos la salud y la vida de las profesionales paramédicas de la medicina, las técnicas en emergencias pre-hospitalarias, camilleras y conductoras de ambulancias.

El Comunicado Técnico del Panorama Epidemiológico reportó el pasado sábado que incrementó a 94 casos el número de trabajadores de la Salud contagiados por COVID-19 en el estado de Oaxaca.

De acuerdo a los Servicios de Salud de Oaxaca, este sábado hubo un crecimiento de 19 trabajadores de salud contagiados, aunque no precisan en qué hospitales se encuentran.

De los 94 contagiados, 41 forman parte del personal médico, 49 del área de enfermería y cuatro realizan otras tareas dentro de los hospitales.

Con respecto a los médicos contagiados 27 son hombres y 14 mujeres, mientras que del área de enfermería, 10 de los contagiados son hombres y 39 mujeres.

Con respecto a las otras áreas se contabilizan un hombre y 3 mujeres. En total hasta el sábado sumaban 56 médicos, enfermeras y personal de otras áreas en los hospitales.

alfredo_daguilar@hotmail.com director@revista¿Por qué feministas no defienden DH de las doctoras y enfermeras?-mujeres.com

@efektoaguila

Deja un comentario