Nota del editor:
Han pasado cuatro semanas desde que arrancó el proceso para renovar la gubernatura de Oaxaca y pareciera que la indiferencia social lleva la delantera en toda las encuestas.
A pesar de ser un estado con un largo historial de activismo político y social, hoy gran parte de la ciudadanía oaxaqueña no desea participar de manera activa en la contienda electoral.
La falta de competencia, de propuestas, de plataformas serias y la permanencia de ciertos grupos y personajes controversiales, podrían ser algunas de las causas.
Aunado al poco “entusiasmo” de algunos partidos políticos. Por ello es importante que los candidatos y candidatas se atrevan a replantear su estrategia y puedan aprovechar las próximas semanas para convencer a las y los ciudadanos de Oaxaca, de por qué darles su voto y confiarles su futuro por al menos, los próximos seis años.
De igual forma, es urgente que las y los oaxaqueños comprendan la importancia de su participación activa en la vida pública de la entidad, así como los posibles escenarios de gobierno que se podrían presentar según la propuesta de cada aspirante; conociendo su visión política, social y económica, para poder tomar la mejor decisión.
