3 diciembre, 2024 5:10 AM
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Quienes ejercen responsabilidades públicas deben anteponer interés de mexicanos antes que cualquier interés privado, afirma.  

Ciudad de México.- Después de que el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declarara inconstitucional la Prisión Preventiva Oficiosa en delitos fiscales; el presidente del Senado, Alejandro Armenta Mier, insistió en que es necesario aplicar la ley a los delincuentes que se disfrazaron de empresarios, crearon empresas fantasmas y en el pasado defraudaron a México con más de 4.5 billones de pesos, a través de ocho millones de facturas falsas y con el desvío de una gran cantidad de recursos del patrimonio de las y los mexicanos. 

Durante una conferencia de prensa, Armenta Mier señaló que la Suprema Corte de Justicia de la Nación “se puso de rodillas frente a los delincuentes de cuello blanco”, con la decisión de declarar inconstitucional la aplicación de la prisión preventiva oficiosa para los delitos fiscales de contrabando, defraudación y compra y venta de facturas.  

“Quienes ejercemos una responsabilidad pública, tenemos que anteponer el interés de los mexicanos antes que cualquier interés privado, y estar del lado de los delincuentes de cuello blanco es estar en contra de México”, expresó en conferencia de prensa.  

“Hoy, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, frente a esta decisión, demuestra que está del lado de los delincuentes y no del lado de los mexicanos”, insistió. 

Armenta Mier agregó que es lamentable que el Poder Judicial se ponga de rodillas, elimina la prisión preventiva contra estos delincuentes de contrabando, de defraudación y de compra y venta de facturas.  

“Quiero diferenciar a los empresarios nacionalistas honestos, trabajadores. Quiero decirles que los empresarios trabajadores honestos se la juegan por México, y los empresarios honestos no son delincuentes de cuello blanco”, subrayó. 

A quienes hemos señalado para que se les aplique la ley contundentemente, es a los delincuentes que se disfrazaron de empresarios, quiñes crearon empresas fantasmas y en el pasado defraudaron a México con más de 4.5 billones de pesos a través de ocho millones de facturas falsas y del desvío de una gran cantidad de recursos del patrimonio de las y los mexicanos. 

Sin embargo, subrayó que los intereses de los delincuentes de cuello blanco se infiltraron durante muchos años en los poderes Legislativo y Ejecutivo, “para que se aprobara la condonación de impuestos, para que los bancos no pagaran impuestos y para que se permitiera, desde el poder, crear empresas fantasmas para saquear a nuestra nación”.